Taller como dirigir nuestras vidas 1-2
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La capacidad de saber guiar la propia vida, de mejorarla y enriquecerla
la llamaremos "LIDERAZGO PERSONAL".
Sin ella, todos nuestros movimientos
no tienen dirección definida: ¿qué le pasaría a un coche que avanza sin
saber dónde se dirige? Debemos dirigir nuestra vida si no queremos que
otros la dirijan por nosotros.

El liderazgo es hacer las cosas correctas y la administración es hacer las cosas bien.
LIDERAZGO + ADMINISTRACIÓN = Hacer bien las cosas correctas


"Nuestra madre nos parió una vez, pero nosotros tenemos que parirnos cada día", Mario Vargas Llosa

La
educación más importante que recibimos es la auto educación, es decir,
la que nos damos a nosotros mismos. El aprendizaje permanente es hoy una
necesidad, y no sólo en el campo profesional. La complejidad creciente
demanda no sólo buenos profesionales, sino personas que tengan la
capacidad de resolver problemas por ellos mismos, que sepan pensar, que
tomen decisiones de calidad. La educación que necesitamos es una
educación global que atiende el máximo número de aspectos que componen
la compleja realidad personal.

Cada persona es un ecosistema complejo,
un mundo con muchos aspectos interactuando al mismo tiempo: su
psicología, sus emociones, su salud, su inconsciente... Las personas
también se hallan en sistemas o contextos que les influyen y que
condicionan su conducta, como por ejemplo la sociedad o la familia. Por
lo tanto, podemos afirmar que hoy es de vital importancia el cultivo de
las habilidades directivas.

La administración de nuestros recursos
siempre se hace según unos criterios más o menos conscientes. Siempre
respondemos a la pregunta "¿A qué vale la pena que dedique mi tiempo y
mi dinero?" con nuestros actos. Conviene que dediquemos tiempo a pensar
los fines para los cuales administramos.

De hecho, la administración de
los recursos es sólo un medio que sirve para unos fines que cada uno
debe determinar. La administración debe hacerse en función de unos
objetivos propios y si no somos conscientes de lo que queremos, de
nuestras prioridades, motivaciones, etc. puede pasar fácilmente que
administremos nuestro dinero y recursos en función de prioridades
ajenas.

Capítulo: El liderazgo personal
Ejercer el liderazgo personal es la
clave de nuestra libertad, ya que con el liderazgo tomamos decisiones
por nosotros mismos e incrementamos la capacidad de decisión de cada
persona. Una persona es más libre cuántas más decisiones importantes
toma y la contabilidad es una herramienta de la administración de
nuestro dinero, pero lo que da sentido a esa administración es el
liderazgo.

Ejercer el liderazgo personal nos ayuda a no dejarnos
llevar por las presiones de la publicidad, de la sociedad, de nuestros
impulsos... Aprender a dirigir nuestra vida es un proceso que no se
acaba nunca. El liderazgo personal es un rol que todos desarrollamos de
una manera u otra. Incluye, por ejemplo:

- Saber lo que queremos.
"¿Qué quiero realmente para mí?" es la pregunta clave. Es conveniente
aclarar la esencia de lo que queremos: podemos querer un coche, un piso,
etc pero sabiendo qué función realizará en nuestra vida, el uso que
haremos de él, las necesidades que cubre y sus características.

-
Aclarar lo que nos motiva, nuestras expectativas, nuestras intenciones.
Nuestros deseos pueden ser confusos, contradictorios, ambiguos o
implícitos (no conscientes). Nuestras intenciones marcan el camino que
seguiremos, son como direcciones que seguimos y a las cuales debemos
dedicar tiempo y energía. Las direcciones que tomamos en nuestra vida
pueden cambiar con el tiempo, por ello, es aconsejable reconocer a
tiempo las necesidades de cambio.

"No hay ningún viento favorable para aquel que no sabe a qué puerto se dirige", Schopenhauer.

-
Aclarar por qué hacemos lo que hacemos. ¿Por qué hacemos una cosa y no
otra? Establecer un por qué nos ayuda a dar un SIGNIFICADO a nuestros
actos. Más que reflexionar sobre el sentido de la vida debemos dar un
sentido a la vida nosotros mismos.

- La clave de conducir está en no
desviarte de tu camino. Aprender a ejercer la voluntad de seguir una
determinada dirección y automotivarnos a seguirla es tan importante como
escogerla.
-Una vez sabemos lo que queremos hay que escoger un orden
de prioridades. Lo primero debe ser lo primero, si conocemos lo que es
esencial conoceremos lo que es superfluo. "Lo superfluo no debe pasar
por encima de lo esencial", dijo Goethe.

Continuamos hablando de los roles del liderazgo personal.

-Los
objetivos generales deben de ir acompañados de unos objetivos más
específicos. Si queremos tener salud, nuestros objetivos deberían ser
hacer gimnasia cada día y comer sano. Si no hacemos nada por aquello que
queremos conseguir es que en realidad no es tan importante para
nosotros.

-Establecer unos métodos para llegar a lo que queremos
(un "cómo") y una estrategia (cómo y cuándo hemos de aplicar los
métodos).

-Determinar los criterios sobre los que basamos
nuestros actos. Existe siempre una filosofía detrás de toda acción, una
misma filosofía que se repite a través de muchas acciones nos lleva a
una filosofía o ética vital. La cuestión es si la escogemos de manera
consciente o no. La filosofía nos lleva a unos valores personales, a
valorar más unos principios que otros.

"Un líder es un filósofo en acción", asegura Antonio Medrano.

-
Ser consciente de los modelos aceptados socialmente y de su posible
influencia en nosotros mismos y en los demás. Al mismo tiempo, podemos
escoger los modelos de referencia que nos van a ayudar a ir en la
dirección que hemos escogido. La vida de Gandhi, de Einstein, de la
Madre Teresa de Calcuta o personas conocidas nos pueden inspirar y
guiar.

- Saber distinguir los medios de los fines. Los
instrumentos que utilizamos para vivir mejor no tienen que utilizarnos a
nosotros.
Compramos el coche para ahorrar tiempo, pero no contamos
todo el tiempo que hemos de dedicar a trabajar para comprarlo y
mantenerlo. Las grandes cosas se consiguen generalmente con medios
pequeños pero utilizados de manera sistemática y constante.

-
Hacernos preguntas, reflexionar. "Las preguntas son la semilla del
conocimiento" (Francis Bacon). La reflexión nos permite aprender de los
errores y formarnos opiniones propias. La alternativa es dejar que los
medios de comunicación o personas influyentes piensen por nosotros.

-
Saber medir las fuerzas y descubrir las posibilidades y los límites de
cada cosa, situación o persona (incluidos nosotros mismos). Para ello,
es necesario aprender a ver la realidad. A veces confundimos nuestros
deseos con la realidad, nos dejamos llevar por ilusiones, fantasías o
autoengaños. Podemos engañarnos de muchas maneras, como por ejemplo
creer que podemos gastar más de lo que tenemos.

- Tener
mecanismos de autocontrol. La retroalimentación es necesaria siempre
para comprobar si vamos en la dirección correcta. Alguien dijo una vez
que "la eterna vigilancia es el precio de la libertad". La libertad
requiere que estemos atentos, la clave de conducir está en no desviarnos
del camino.

PARA NO SER ESCLAVOS DE FACTORES EXTERNOS O
INTERNOS, SE HACE INDISPENSABLE QUE CADA UNO CONSTRUYA SU PROYECTO
VITAL. LA EDUCACIÓN MÁS IMPORTANTE ES LA EDUCACIÓN PARA LA VIDA, Y
COMIENZA CON UN PROYECTO VITAL GRATIFICANTE, UN RETO ESTIMULANTE AL CUAL
SE ORIENTEN NUESTROS OBJETIVOS Y NUESTRAS ACCIONES.





Categoría: Talleres | Agregado por: TerapiasDiarias (27.de Marzo.2011)
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