EL Mal Humor
Compartelo en facebook Mal humor Conozco a un maestro que tenía muy mal humor; casi siempre estaba nervioso y hablaba a los gritos. Como daba clases en la Gran Ciudad y ganaba muy poco, se pasaba el día corriendo de una escuela a otra, y eso le aumentaba los nervios, el cansancio y el mal humor. Cualquier cosita era motivo para que protestara. Levantaba la voz para dar indicaciones a sus alumnos, para polemizar con sus colegas e incluso para hablar de cualquier tema con los directivos. Una vez, el director de la escuela de la tarde le dijo que él lo iba a reemplazar para que fuera a ver a un médico. El doctor le recetó unos tranquilizantes, ciertos ejercicios de respiración y meditación y le dijo que volviera en dos semanas. Pasados los quince días, el maestro volvió al consultorio, y el médico le preguntó cómo estaba y cómo se sentía. El maestro respondió con absoluta inocencia: - No sé si sus remedios han servido para calmarme; lo que sí noto es que mis alumnos y mis amigos están mucho más tranquilos que de costumbre. Juan C. Pisano- María I. Casalá Reflexiones - El mucho hacer y hacer el ánimo puede afectar. El trabajo dignifica al hombre, pero su abuso se le puede convertir en una carga. De esta manera, lo que constituye un placer y medio de vida, se torna en todo un conflicto emocional. El descanso es un refrigerio para el alma, presurosa de los afanes de la vida. - Por lo general, son los que nos rodean aquellos que se benefician o perjudican con nuestro comportamiento. A veces esto no es muy claro para las personas que viven de conflicto en conflicto, y se crean problemas por todo. La sabiduría para vivir también es un bien por conquistar. - Nunca es de despreciarse la ayuda sincera que otros nos dan; a veces una mirada objetiva y neutral, de mucho mal nos puede librar. | |
Categoría: Cuentos para pensar | Agregado por: TerapiasDiarias (04.de Mayo.2011) | |
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